El vino es una de las bebidas más antiguas, existe desde los sumerios, los egipcios, los griegos hasta el presente siglo. Es por ello que hoy en día saber de vinos te da sofisticación. Pero saber de vinos va más allá de distinguir entre tintos, blancos y rosados, lo más importante reside en saber los diferentes tipos de uvas de las que están hechos. Un conocedor Harry’s tiene que saber esto, aquí te presentamos los principales tipos de uvas.
Los vinos blancos, como ya lo mencionamos anteriormente en nuestra entrada sobre maridaje, son perfectos para acompañar pescado, mariscos y quesos suaves. Los tipos de uva que se utilizan para crear estos vinos blancos son:
Chardonay
Considerada por muchos como la mejor uva blanca. Esta se produce en la borgoña francesa, aunque su cultivo se ha extendido a muchos otros países. De ella se obtienen vinos con mucho cuerpo, estos son aquellos vinos con mayor grado de intensidad de sensaciones sápidas y trigeminales es decir aquellos con mayor densidad y consistencia.
Riesling
De origen Alemán, cultivada en climas frescos en donde se utiliza para vinos secos, pero dulces, reconocida también por sus ricos aromas. Ideales para consumirse como acompañante de postres. Otras regiones en las que se cultiva esta uva son Argentina y Chile.
Chenin o Pineau
De origen Francés, es una uva que viene en racimos medianos y compactos con aromas completamente frutales, utilizada para la elaboración de blancos frutados, ligeros y frescos. La forma de distinguir esta uva es gracias a sus aromas principales: avellana, madreselva y bizcocho. Y en boca, sus sabores a manzana, duraznos, nueves, avellanas y miel.
Sauvignon Blanc
También proveniente de la región de Burdeos, Francia. Esta uva es de tamaño mediano, redonda y de color amarillo-dorado y de su fermentación nacen vinos de aroma intenso y con matices herbáceos, secos y ácidos.
Semillón
Variedad de uva de la región de Burdeos, en Francia, de maduración rápida por lo que es preferible que sólo se produzca en climas frescos. Tiene un gran contenido de azúcar y acidez y se utiliza para vinos secos o dulces. Destacan sus aromas a banana y pan tostado y sus sabores a damasco, crema y cítricos. Un vino con esta uva es un perfecto aperitivo.
Mientras que los vinos blancos hacen una perfecta combinación con las carnes blandas, los tintos van con carnes rojas, quesos fuertes y embutidos. Las uvas que se cultivan para la producción de vinos tintos son:
Cabernet Sauvignon
Esta uva a pesar de ser de Origen Francés ha tomado mucha fuerza en Sudamérica, específicamente Argentina, Chile, Perú y Uruguay. De ella se elaboran vinos robustos, que añejan de tal forma que dan paso a aromas elegantes y sabores complejos; grosella negra, tabaco y madera, esto gracias a su afinidad por el roble.
Merlot
Originaria de Burdeos, donde integra los cortes con el Cabernet Sauvignon. Los aromas y sabores de uno y otro son similares, pero en la boca el Merlot es más débil que la del Cabernet. El Merlot es un vino de medio cuerpo, y su uva tiene un sabor a ciruela, cerezas y grosellas. Además no puede añejarse por mucho tiempo.
Syrah
Nace de un cultivo persa que luego llegó a Francia. Hoy la puedes encontrar en todo el mundo. Con ella se producen vinos robustos de color rojo intenso y aroma profundo, específicamente a moras y tabaco.
Pinot Noir
Esta a pesar de que se encuentra en todo el mundo, fuera de la Borgoña) es difícil de vinificar. Es usada para la elaboración de vinos espumosos y vinos claros, de medio cuerpo y que en ocasiones suelen pasar por una fase muda donde no se aprecian ni sabores ni olores. Cuando son jóvenes tienen aromas frutales y a medida que envejecen pueden adquirir un olor a aves de corral.
Ahora ya sabes que un vino va más allá de su color. Para saber el tipo de uva que lo compone recuerda tomar en cuenta su lugar de producción, la tonalidad, el sabor y sobre todo el olor. Conviértete en el dios Baco de todas las reuniones.